El trabajo del Home Stager consiste en utilizar estas técnicas para resaltar los puntos fuertes y minimizar los puntos débiles de un inmueble. Por lo tanto, no se trata de esconder los defectos, sino de arreglarlos. Tampoco se trata de decorar la casa, ya que la decoración es algo muy personal y en el caso del Home Staging el objetivo es convertir la vivienda en un sitio neutro y acogedor en el que la mayoría de los visitantes se sientan cómodos.
Para vender o alquilar su vivienda o local cuando la oferta abunda y los posibles clientes son muy exigentes, hay que destacarla de la competencia. Tras aplicar técnicas de Home Staging, los locales lucen impecables, confortables y acogedores, destacando así entre la oferta existente.
Los inmuebles que no están en perfecto estado son muy a menudo objeto de negociaciones de precio importantes, con recortes de hasta un 15 %. Un local en el que se ha aplicado un Home Staging limita toda posibilidad de negociación, ya que al no existir nada que criticar se vende a su verdadero valor.
Gracias al Home Staging los inmuebles se venden rápidamente y al mejor precio.